Las estufas de pellet y de leña representan uno de los sistemas más ventajosos e innovadores para la calefacción doméstica.
Por un lado son prácticas y fáciles de usar, el funcionamiento es completamente automático y se gestiona electrónicamente
con lo que se puede realizar un control a distancia. Aunque, reducen enormemente los gastos de calefacción respecto a los
combustibles fósiles tradicionales por lo que permiten ahorrar.
La ventaja de la calefacción de biomasa se basa en que, con el mismo calor producido con pellet, leña o huesos de aceituna,
es significativamente más económica respecto al gasóleo, la electricidad, o el gas.